Powered By Blogger

martes, 21 de diciembre de 2010

La honestidad, ante todo.

En un pueblo muy lejano, se encontraba un hombre muy humilde, pobre, bueno, generoso, con un gran corazón, llamado Juan.
Durante toda su vida vivió en la calle, sin la ayuda de nadie. Desde muy pequeño quedó huérfano, solo, tuvo que aprender a sobrevivir. A pesar de la vida que le había tocado vivir, nunca bajó los brazos, siguió luchando por el, pero principalmente por los demás. Trabajó siempre y lo poco que ganaba lo donaba.
En sus tiempos libres iba a jugar a la pelota con niños también huérfanos como él. Ese mismo día, luego de haber jugado con los niños en su recorrido, detrás del árbol donde él vivía encontró algo extraño, lo miró detenidamente y supo que era un maletín repleto de dinero .Juan no supo como había llegado hasta ahí y esa noche durmió muy intranquilo esperado la llegada de alguien. Al día siguiente regresó a ese mismo legar un hombre muy elegante quien le preguntó si había visto un maletín, Juan le dijo que sí pero quiso buscar algunas pruebas para comprobar si verdaderamente era el dueño. Éste busco dentro del maletín y encontró fotos y documentos que sirvieron como prueba para devolvérselo.
El hombre muy agradecido por su actitud, quiso recompensarlo con parte del dinero y una casa. Juan no pudo creer lo que le estaba pasando, él aceptó la casa pero el dinero fue donado a los a los niños huérfanos.
De esta manera Juan se sintió en paz debido al acto de solidaridad que había realizado con los niños huérfanos y también al dueño del maletín.

Rolla Magalí y Lamberto Lucía.-

No hay comentarios: